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¿Qué son las tarjetas capturadoras de video y para qué sirven?
Las tarjetas capturadoras de video son dispositivos que permiten grabar y digitalizar señales de audio y video desde diferentes fuentes, como cámaras, consolas de juegos, televisores o reproductores de DVD. Se pueden conectar al ordenador mediante interfaces como USB, HDMI o PCI Express, y se pueden usar para diversos fines, como hacer streaming, editar videos, grabar partidas o convertir formatos analógicos a digitales.
Tipos de tarjetas capturadoras de video
Existen diferentes tipos de tarjetas capturadoras de video según su forma, su conexión y su capacidad de compresión. Algunos de los más comunes son:
Tarjetas de captura con compresión de video por hardware. Digitalizan el video analógico y lo comprimen en formatos como DV y MPEG-2 âsobre la marchaâ. Estas tarjetas son las más costosas, porque pueden digitalizar rápidamente los datos de video sin utilizar el CPU.
Tarjetas de captura sin compresión de video por hardware. Digitalizan el video sin ninguna compresión. Estas tarjetas son más baratas, pero requieren un CPU potente y un disco duro con gran capacidad para almacenar los archivos de video.
Tarjetas de captura externas. Son dispositivos que se conectan al ordenador mediante un cable USB o HDMI. Suelen ser más fáciles de instalar y transportar que las internas, pero pueden tener una menor calidad o velocidad de captura.
Tarjetas de captura internas. Son dispositivos que se instalan dentro del ordenador, en una ranura PCI Express o similar. Suelen tener una mayor calidad y velocidad de captura que las externas, pero requieren abrir el ordenador y tener espacio disponible.
Cómo elegir una tarjeta capturadora de video
Para elegir una tarjeta capturadora de video adecuada a nuestras necesidades, debemos tener en cuenta algunos aspectos como:
La fuente de entrada. Debemos asegurarnos de que la tarjeta tenga la conexión compatible con la fuente que queremos grabar, ya sea HDMI, USB, S-Video o RCA.
La resolución y la frecuencia. Debemos elegir una tarjeta que pueda capturar la resolución y la frecuencia que deseamos, ya sea 4K, 1080p, 720p o inferior, y 60 fps, 30 fps o menos.
La compresión y el formato. Debemos elegir una tarjeta que pueda comprimir el video en el formato que queremos usar, ya sea MPEG-4, H.264, H.265 o RAW.
El software y los drivers. Debemos elegir una tarjeta que tenga un software compatible con nuestro sistema operativo y que nos permita configurar y controlar la captura. También debemos asegurarnos de que los drivers estén actualizados y funcionen correctamente.
El precio y la calidad. Debemos elegir una tarjeta que tenga una buena relación calidad-precio según nuestro presupuesto y nuestras expectativas. Podemos comparar las opiniones y las valoraciones de otros usuarios para orientarnos.
Conclusión
Las tarjetas capturadoras de video son dispositivos útiles para grabar y digitalizar señales de audio y video desde diferentes fuentes. Existen diferentes tipos según su forma, su conexión y su capacidad de compresión. 51271b25bf